Se impuso por 3-0 en el Nuevo Gasómetro y terminó segundo en el Grupo 1, liderado por Cruzeiro. Bergessio, Rosales -en contra- y Silvera anotaron para el equipo de Ramón Díaz, que logró la victoria que necesitaba para pasar a los octavos de final de la Libertadores.
Cuánta ilusión que hay en la gente de San Lorenzo. Y no es para menos. Después de un comienzo con pocas luces, tanto en la Copa como en el Torneo Clausura, el equipo levantó su nivel y se metió de lleno en la pelea de ambos campeonatos. Pero hoy, el Ciclón, en la búsqueda de su principal objetivo, llamado Libertadores, tenía una prueba de fuego ante el Caracas de Venezuela. A ganar o ganar. Y realmente así se lo tomó el equipo de Ramón.Jugando de manera muy contundente y con el empuje de una hinchada que llenó el Nuevo Gasómetro, San Lorenzo ganó por 3-0 y consiguió el pase a los octavos de final. Gonzalo Bergessio a los 17 minutos de la primera etapa, el arquero Rosales, en contra a los 36 y Andrés Silvera a los 34 pero de la segunda mitad, hicieron los goles del conjunto de Boedo, que terminó segundo en el Grupo 1, detrás del Cruzeiro y espera a alguno de los primeros de las otras zonas. San Lorenzo se convirtió además en el tercer representante argentino que superó la segunda fase este año y cortó así una racha de varios años sin poder sortear la ronda de grupos. Ayer, Estudiantes de La Plata y Lanús ganaron sus partidos y consiguieron el boleto a octavos de final.
Esta noche, en el Nuevo Gasómetro, en todo momento se vivió un ambiente de Copa. Unas 50 mil personas respaldaron en las gradas al Ciclón, como para que no quede ni la menor duda de que levantar ese trofeo por primera vez en la centenaria historia del club es más que una obsesión.
San Lorenzo salió a plantarse en el campo rival y Andrés D'Alessandro desde el sector izquierdo asumió el papel de conductor. Otro que se destacó en la formación local fue ese incansable delantero que es Bergessio. Entre ellos, justamente, generaron la primera chance de gol del partido. A los 3, hubo una buena pelota del enganche para el delantero, pero el ex Racing se demoró y el arquero controló en dos tiempos.
Seis minutos más tarde intervinieron los mismos protagonistas de la escena anterior, pero tras el desborde y el centro de Bergessio, apareció Rivero quien remató de manera muy defectuosa. A partir de ese momento, el equipo venezolano salió un poco del encierro por la movilidad de sus volantes, pero esa actitud no le duró demasiado.
Pasado el cuarto de hora, San Lorenzo se apoderó definitivamente de la pelota y logró la primera conquista. D'Alessandro tocó para Adrián González por derecha, el capitán tiró un centro pasado, Diego Placente devolvió el balón hacia el medio y Bergessio dentro del área chica conectó casi sin marcas.
El partido que parecía que iba a jugar el Caracas en Buenos Aires quedó totalmente desterrado de la cabeza de todos los hinchas y protagonistas. Nueve minutos más tarde San Lorenzo tuvo otra oportunidad. D'Alessandro puso un pelotazo cruzado para la entrada de Silvera y el atacante disparó con contundencia, pero su envío dio en la base del palo izquierdo.
El segundo gol llegó por un error de Juan Valencia. D'Alessandro, otra vez protagonista, recuperó la pelota y Sebastián Méndez tiró un centro pasado. Bergessio tocó para el medio y entre Silvera y Rosales terminaron enviando el balón al fondo de la red.
La segunda parte pareció estar de más para el equipo visitante. San Lorenzo dominó a voluntad y hasta Ramón Díaz empezó a cuidar jugadores para atender lo que se viene en el Torneo Clausura. Igualmente, la frutilla del postre iba a llegar gracias a otro regalo del arquero. Rosales falló al querer rechazar el balón y Silvera la empujó con el arco vacío.
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